Este breve ensayo fue escrito hace algunos años. Aunque mis intereses se han distanciado de las reflexiones sobre el lenguaje, he decidido sembrarlo en el blog para que su destino tenga el beneficio de un juicio público.
Una minoría social es capaz de crear nuevas lenguas formales a partir de una lengua materna. Esto sucede, no porque el pensamiento potencialmente traducible este más allá de cualquier lenguaje formal, pero porque el usuario del lenguaje tiene acceso a los contenidos estructurales del emergente lenguaje mediante un lenguaje “cerebral” mucho más dinámico y versátil que la lengua materna. Si utilizamos la palabra lenguaje como sistema de signos, podemos pensar que una diferencia de significado situado en cualquier nivel de complejidad estructural constituye una diferenciación de lenguajes. Se propone la tesis de que aquellos lenguajes que experimentan una evolución “epigenética” pasan por tres movimientos de subversión: diacrónica, semántica y gramatical. Las dos últimas etapas son procesos de divergencia lingüística y a menudo constituyen las últimas etapas de génesis lingüística. La génesis lingüística se puede concebir como un proceso de institucionalización o sincronización ideológica [2] en cuanto introduce un sentido ahistórico en la práctica lingüística. Evidencia de procesos de sincronización también se han observado dentro de marcos fenomenológicos más amplios como lo son la codificación genética de adquisiciones culturales [3]. Más aún, la relación entre semanticidad y gramaticidad de un lenguaje esta determinado por las condiciones funcionales locales en el espacio-tiempo social. La gramaticidad no solo actúa como mecanismo de sincronización, pero también permite versatilidad en las construcciones lingüísticas permitiendo múltiples posibilidades para la articulación de sentidos alrededor de un mismo conjunto de elementos semánticos. En retrospectiva podemos distinguir tres procesos críticos en la evolución del lenguaje: divergencia lingüística, reproducción lingüística y relajación de la tensión funcional entre la razón semántica y gramatical. Una cuestión de interés es el análisis de los límites en la extensión de la subversión gramatical. En particular nos interesa exponer las relaciones entre la emergencia ideológica de universales éticos y su manifestación en forma de restricciones sobre elementos gramaticales. Por ejemplo, el asesinato se constituye socialmente como un elemento gramatical, en la medida en que su significado moral depende del contexto formal bajo el cual se realiza la lectura del acto [4]. En la medida en que el asesinato se construye socialmente como un elemento lingüístico independiente del contexto formal, se constituye como un elemento semántico formal. Precisamente, los movimientos pro-derechos humanos, humanización de la guerra, etc. Promueven una semantización formal a nivel ético. Las limitaciones gramaticales por semantización formal como las expuestas en el anterior ejemplo, también pueden sugerir que la subversión semántica posea una condición más que transitoria en la evolución del lenguaje según las etapas de génesis expuestas en los anteriores párrafos.
[1] Condiciones similares a la epigénesis molecular existen en la evolución cultural, es evidente que la evolución de estrategias socioculturales no se da en un ambiente de selección Darwinista. Los individuos en condiciones económicas y culturales desfavorables no suelen ser eliminados biológicamente, pasan a conformar las clases marginales; caldo de cultivo de nuevas estrategias socioculturales que se manifiestan ideológicamente en nuevas formas de ver, pensar y relacionarse.
[2] Igualmente se ha sugerido a la filosofía como código de la historia, dejando en evidencia su íntima relación con el lenguaje.
[3] D. Dor and E. Jablonka, Cultural Selection to Genetic Selection: A framework for the Evolution of Language.
[4] Al referirnos a contexto formal enfatizamos que la subjetividad del signo no se da por parte del lector pero de los elementos lingüísticos que se articulan al signo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario